OTRO MAS... PERO SIN LA LUPA

ANTI DOPING POR TOMAR ALARGADOR PENEAno

El jugador de básquetbol Roburt Sallie, del Tarragona de España, 

obtuvo repercusión mundial en estos días luego de dar positivo 

en un control anti doping. La notoriedad, sin embargo, no se 

debió a su fama como jugador sino a las características de su 

dopaje: Sallie tomó Extenze, un medicamento que se promociona 

como alargador peneano.

Roburt Sallie, del Tarragona de España, no pasó un control anti 

doping el 18 de noviembre, aunque los motivos recién se dieron

 a conocer esta semana.
Según un artículo de Sport, el estadounidense fue sometido al 

control tras el partido entre el Tarragona y Knet el 18 de 

noviembre. Sallie estuvo veinte minutos sobre la cancha y 

anotó cinco puntos. Una vez conocido el positivo, el 

Tarragona decidió prescindir de él "por motivos disciplinarios".
Detrás de esta excusa se escondía un positivo por el uso de

 un medicamento que responde al nombre de Extenze y 

que se promociona en los programas de telecompra por 

36 dólares. Extenze se anuncia como el medicamento más

 vendido en Estados Unidos para alargar el pene.
En las primeras explicaciones a la radio de su país, Sallie 

negó la noticia, pese a la información filtrada por su club. 

"Pasé un control antidoping en noviembre. Dije todo lo que 

tomaba: vitaminas... y unas pastillas afrodisíacas. 

En ese momento no sabía el nombre de las pastillas porque 

me las dio un compañero de equipo. Y cuando al final 

descubrí el nombre de las pastillas, vi que se llaman '

Black Ants' ('Hormigas Negras'). Una semana después el 

club me preguntó si había tomado Extenze y les dije que no. 

Tengo pruebas de lo que tomo, el paquete. Ha sido un día 

divertidísimo. Lo único que he hecho al ver el artículo ha sido reírme. 

Si de verdad crees que yo tomo Extenze porque tengo complejo...", 

apuntaba.
Sus otras aclaraciones tampoco sirvieron. "En el vestuario 

había otros doce tipos, españoles. No estoy habituado a

hablar con otros tipos de mi equipo, que están desnudos frente a mí. 

No me siento cómodo. Prefería ducharme en casa, 

porque es mi privacidad. No sé cómo pueden acusarme de tomar píldoras

para alargarme el pene. En Estados Unidos es diferente. No tengo 

una conversación con todo el mundo completamente desnudo, 

porque no quiero hacer que nadie se sienta incómodo», 

dijo para explicar su comportamiento con los compañeros del equipo.